Anna ha vuelto a reprobar su clase de inglés. Está cansada de intentarlo, pero sus padres contrataron a un tutor personal, Gi Joey, para que la ayude. Los dos no se llevan bien, pero hay una vibra cachonda entre ellos. Gi Joey no puede trabajar con Anna, ya que constantemente hace cualquier cosa para alejarse de sus clases. Luego, Anna juega con él como una colegiala traviesa, convenciéndolo de que se la folle. Gi Joey ya no puede resistirse más, así que le sigue el juego con la esperanza de que su alumno saque algo de esta experiencia.