Estaba estacionado al costado de la carretera durante mi descanso cuando este sexy italiano se subió al Fake Taxi con un atuendo sexy y un látigo. La nena vestida de cuero quería que la llevara al Black Club, y cuando le pregunté su nombre, dijo que podía llamarla “Madame”. Quería ver más a la dominatriz de cabello rubio, así que le ofrecí un descuento en el viaje y finalmente me permitió detenerme y unirme a ella en la parte trasera del taxi. La domme tatuada me ordenó rasgar sus medias de red y lamer su coño, ¡luego se sirvió mi polla larga y gruesa! Después de atragantarse, se subió encima y me montó hasta el orgasmo en vaquera y al revés, y luego me acurruqué con la yegua pervertida en el asiento trasero. Luego, sacó su culo apretado y firme y me invitó a follarla al estilo perrito hasta que salí y cubrí su bonita cara con mi semen.