Conor descubre que a su madrastra, Jazmine, le gusta meterse cosas en el culo y que a veces puede ser un poco dura, por lo que le revisa el ano en busca de heridas. Más tarde, el niño descubre que a ella también le encanta publicar contenido en línea al respecto y le preocupa que ella pueda lastimarse. Preocupada porque su base de fans tenga tantos pensamientos lascivos sobre ella, Conor quiere asegurarse de que su audiencia sepa que no está disponible. Al caer en la trampa de Jazmine, Conor decide que tiene que follar con su madrastra y publicar las fotos en su perfil como una forma de cuidarla.