Los compañeros de cuarto Katy Rose y Angelo Godshack tienen una racha competitiva, y ambos tienen que vigilar de cerca sus pertenencias. Cuando Angelo obtiene un nuevo visor de realidad virtual para pornografía interactiva, Katy quiere experimentarlo por sí misma. Se acerca sigilosamente a Angelo, que se está poniendo sucio y se masturba mientras usa los auriculares, y lo empapa, escondiéndose detrás del sofá mientras Angelo se quita los auriculares y sale corriendo a buscarla. Katy regresa a su habitación, se desliza hacia su propio mundo de realidad virtual y procede a acurrucarse en una almohada, seguida de una acción con un consolador. Sin embargo, su masturbación le impide darse cuenta de que Angelo se ha colado y la ha descubierto, y cuando cambia furtivamente su consolador por su polla dura, Katy es transportada de regreso a la realidad para tener múltiples orgasmos. Después de drenar la polla de Angelo hasta la última gota de semen, está claro que la realidad virtual no sustituye a la realidad.