La universitaria Kenzie Reeves realmente quiere follar con su nuevo novio Van Wylde, pero como le prometió a su padre que no le pondría un dedo encima, está recurriendo al juego de pies para complacer a su hombre. Conmocionada por el comportamiento lujurioso de Kenzie, su nueva madrastra conservadora Syren de Mer crea una “manta de castidad” para evitar que la hija de su prometido y su novio follen bajo su techo. Atrapados bajo la manta, Van y Kenzie intentan todo para liberarse. Van termina perforando su lado de la manta con su polla dura, y pronto, abre un agujero en el costado de Kenzie y comienza a follarla. Cuando Syren los pilla follando, está tan enojada que le da una palmada en el delicado trasero a Kenzie. Van se excita con el castigo de su novia y comienza a masturbarse. No pasa mucho tiempo antes de que la madrastra y la pareja traviesa unan fuerzas para un trío lascivo.
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