La hijastra de Jonathan Jordan, Michelle Anderson, es una niña aburrida y solitaria. Aunque tiene unas bonitas tetas. Jonathan Jordan no puede evitar sentirse mal por ella, así que decide masturbarse mientras la espía jugando con su coño. Ella lo atrapa pero le gusta que la espíen. Ella se aceita el culo y se pone las tetas mientras él mira. Ella está tan metida que deja que se la folle antes del trabajo. Ella lo monta, le chupa la polla y deja que se la folle a cuatro patas. Finalmente, se corre en su cara.