La tetona diosa del sexo italiano Marica Chanelle recurre al reparador Lutro cuando tiene algunas tuberías obstruidas en la cocina, y estando cachonda como el infierno, aprovecha la oportunidad para satisfacer no solo las suyas, sino también las necesidades de su hija Gina Gerson cuando el semental bien dotado viene a su rescate. Lutro no puede creer su suerte de tener a las dos hermosas rubias atendiendo su polla con sus bocas hambrientas y coños afeitados. Las dos ninfas se turnan para que les quiten la luz del día al estilo perrito o encima de la mesa de la cocina. Madre e hija hacen equipo cuando las dos chicas entran en 69 para que Gina pueda ser follada mientras Marica las lame a las dos desde abajo.