El padre de Ricky Johnson falleció. Con esas malas noticias viene algo bueno: una herencia considerable de la que su sexy hermanastra, Gianna Dior, espera recibir un corte. Así que está bastante sorprendida de escuchar que su padrastro no le dejó ni un centavo y en cambio le dejó todo a Ricky. Bueno, una niña tiene que comer, y Gianna está más que feliz de llegar a un acuerdo con su hermanastro. Simplemente, si ella se lo folla, él le dará una cuarta parte del dinero de la herencia. Y lo folla ella lo hace. Ricky está ansioso por complacer y comienza las cosas con un poco de lamida de coño. Entonces Gianna le devuelve el favor, tomando la gran polla dura de Ricky en su boca y deslizándola dentro y fuera de su garganta. Finalmente, llegan a lo que acordaron: la verdadera puta. Ricky golpea su polla en el coño de Gianna hasta que no puede soportarlo un segundo más y desata su semen en la cara bonita de Gianna.